Tras anunciar su campaña hacia la reelección, el presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, exhortó este domingo al Congreso a prohibir los rifles de asalto, luego de uno de los últimos 200 tiroteos masivos en lo que va de año en la nación norteamericana, informó Fuser News.
El mandatario estadounidense se refirió al episodio de este sábado en el centro comercial Allen Premium Outlets de Texas donde murieron ocho personas, incluidos niños.
A través de su cuenta en Twitter, el Departamento de Policía de Allen indicó que un efectivo «se enfrentó al sospechoso y lo neutralizó».
Detallaron en un comunicado que “siete personas, incluido el sospechoso, fallecieron en el lugar. Nueve fueron transportados a hospitales regionales donde dos sucumbieron más tarde a sus heridas. Hasta el sábado por la noche, tres víctimas se encontraban en estado crítico y cuatro estables”.
Imágenes de video que circulan las plataformas digitales muestran a un hombre saliendo de un automóvil en el estacionamiento del centro comercial donde abrió fuego contra las personas que caminaban cerca.
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El atacante vestía equipo paramilitar y portaba un rifle de asalto estilo AR-15 y cargadores adicionales y aunque algunos medios estadounidenses identificaron al sospechoso como Cristian Mauricio García, un hispano de 33 años, la Policía de Allen no había publicado la identidad del responsable hasta este domingo en la noche.
Esta es la segunda mayor tragedia del año en Estados Unidos, después del tiroteo de Monterey Park en California que dejó once muertos en enero.
El presidente Joe Biden, habló este domingo de los «actos de violencia sin sentido» en Texas y volvió a urgir al Congreso a tomar medidas.
«Una vez más, le pido al Congreso que me envíe un proyecto de ley que prohíba las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad. Que promulgue verificaciones universales de antecedentes. Que exija almacenamiento seguro (de las armas). Que ponga fin a la inmunidad para los fabricantes de armas», enfatizó en un comunicado, pese a que su gobierno es uno de los principales proveedores de armamento y financiamiento para Ucrania ante el conflicto con Rusia.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, calificó el tiroteo como una «tragedia indescriptible», no obstante, el estado americano es uno de los más permisivos en materia de porte de armas.
De acuerdo con la agencia DW, Estados Unidos tiene la mayor tasa de muertes por arma de fuego de todos los países desarrollados, 49 mil en 2021, frente a las 45 mil del año anterior, además de trabajos de investigación que exponen un aumento del 50% en muertes por armas de fuego en menores estadounidenses.